Experiencia Despierta, Visión de Atentado.

 


Dios les bendiga, les saludo con la paz del Señor Jesús. Quiero contarles una experiencia que tuve el día 12/09/2020.

Esta tarde un familiar inconverso estaba viendo una película sobre un atentado terrorista contra los Estados Unidos, contra la Casa Blanca,  (yo no veo televisión) de repente me tomó el Señor, no aguanté, estallé en llanto frente a mi familia.  Yo no podía controlar el llanto, no podía controlar el dolor que yo sentía en mi pecho, era un dolor muy fuerte, dolor que me da cuando Dios me habla en el espíritu, pero esta vez fue mucho mas fuerte. Y me tuve encerrar en mi cuarto a orar, todos me miraban con los ojos bien grandes me preguntaban qué me pasaba, y yo no me podía parar de llorar. 

Esto es lo que el Señor me dijo: “Ese atentado va a suceder, atentado! atentado! me repetía una y otra vez, y el dolor no me dejaba hacer nada más que gemir y llorar. 

​Me hablaba de atentado, de atentado y yo solo lloraba y lloraba, sentía mucho dolor, cuando pude hablar comencé a  pedir misericordia por las vidas inocentes y la del presidente; porque el Señor conoce nuestras vidas, sabe lo que va a suceder.  

Estuve con ese dolor en mi pecho, varias horas, no lo podía soportar mucho. Oraba y oraba pero el dolor no se iba. Ya al paso de las horas se fue y pude descansar. 

A pesar de todo lo que está pasando en el mundo, Dios tiene todas las cosas bajo control y yo les cuento esto para que nos unamos en clamor, en misericordia por los Estados Unidos para que el Señor dé libramiento a muchas vidas inocentes.

Mientras yo pedía al Señor misericordia por las almas que morirán, por esas personas que trabajan en la Casa Blanca, el Señor me dijo: “No los puedo cuidar, porque están en adulterio, en pecado de muerte y así no puedo cuidar a estas personas. Solo puedo cuidar a los míos en este tiempo, solo a mis santos, porque mucha gente está en pecado de muerte, no confían en  mí, así no los puedo guardar. Es necesario que estén a cuenta conmigo y no esconderme nada, no puedo cuidar a quienes no son sinceros conmigo”.

Yo no sé si esto sucederá en el gobierno actual o no, Dios no me lo dijo, solo que sucederá.   

Pero si el atalaya viere venir la espada y no tocare la trompeta, y el pueblo no se apercibe, y viniendo la espada, hiriere de él a alguno, éste fue tomado por causa de su pecado, pero demandaré su sangre de mano del atalaya. Ezequiel 33:6


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